Se toma como trasfondo para la exposición la problemática teólogica de la universalidad del cristianismo para problematizar las posibilidades de futuro del cristianismo, desde una perspectiva histórica y teórica. O sea se parte de un proceso histórico, el cual es a su vez proceso teórico y que se determina con el proceso de aculturación de la fe cristiana en la fe occidental. El cristianismo occidental, ha intentado apoderarse del mundo, presentándose como la versión vinculante para todos, pero por el contrario ha reducido las potencialidades de expresión del cristianismo, de allí que en el tema se vincule el futuro del cristianismo con el hecho de la posibilidad de arrancar al cristianismo del monopolio de una tradición cultural. De tal manera el futuro del cristianismo depende de su capacidad o no de liberarse de la cultura en la que de forma predominante se ha expresado e historizado hasta la actualidad. Se agrega que es importante tener presente que la crisis actual del cristianismo es el reflejo de la crisis general de la cultura occidental. Por ello el futuro del cristianismo depende de su propia capacidad de transformarse en una verdadera opción y contribuir a la transformación de la civilización. OB/LOB