Se ahonda en el cambio que provocó en el pensamiento de la iglesia católica la promulgación de la encíclica papal Rerum Novarum, del Papa León XIII. Esta encíclica respondió a la problemática obrera de la época y por primera vez la iglesia deja un poco de lado los asuntos religiosos, para ahondar en la problemática social del proletariado, se busca de esta forma responder a los diferentes problemas que va generando el desarrollo de la humanidad y esto da origen a la doctrina social de la iglesia que será el sustento de la acción pública y privada del laicado cristiano en la búsqueda de soluciones a los problemas del hombre y de las sociedades. La encíclica va dirigida a mejorar condiciones laborales de los obreros y a frenar los abusos cometidos por sus patrones. León XIII, aboga por el entendimiento entre el capital y el trabajo, ya que no puede subsistir el uno sin la colaboración del otro, se enfatiza en el respeto por la dignidad humana, el derecho a la propiedad privada definido como inherente a la naturaleza humana e indispensable para la plena realización de los hombres. Se señala la importancia de la encíclica papal Mater et Magistra y Pacem in Terris, promulgada el 15 de mayo de 1961, por el Papa Juan XXIII, en donde se reitera la importancia del respeto a la vida humana, a la propiedad, al trabajo, a los salarios, al estado, al bien común. La libertad de conciencia enfatizando en la problemática económica y social, el desarrollo integral de todos los hombres, mejorando las condiciones de vida mediante el crecimiuento económico y el progreso social. Finalmente se habla del ocaso del marxismo en donde se analiza la posición del Papa Juan Pablo II ante la eminente caída de la doctrina marxista. OB/JM