El artículo analiza el valor estratégico de Centroamérica desde el punto de vista geopolítico para los Estados Unidos. Se argumenta que esta región excede su importancia comercial y económica en tanto existe una serie de factores que han favorecido la integración económica regional y su estabilidad en términos políticos. En este contexto, se propone el TLC como una herramienta que junto a otras políticas nacionales y regionales, aminorará vulnerabilidades y riesgos de la zona. Asimismo se afirma que este tratado se constituye en la estrategia buscada para la estabilidad macroeconómica y la apertura comercial, lo cual, en última instancia beneficiaría el desarrollo económico, social, cultural y político de la región. No obstante, se advierte que para ello se necesita de políticas adicionales que mejoren su potencial para Centroamérica y reduzcan los perjuicios en ciertos sectores de la economía