Colección Centroamérica

El ejercicio de la violencia política en Centroamérica ha significado más de un millón de refugiados y desplazados, más de cien mil muertos y desaparecidos y la destrucción de la infraestructura física. En la última década ha sido Centroamérica la región de América Latina con mayor nivel de conflicto, la violencia se ha manifestado de diversas formas en esta región: violencia estatal, subversiva, guerrillera, terrorismo y otros. La excepción para la región lo constituye Costa Rica, así que el fenómeno no es homogéneo. Se analiza el terrorismo en el contexto general de la crisis y los intentos por superarla, si se resolviese el problema de la violencia en Centroamérica, esto permitiría rearticular las relaciones entre los civiles y los militares, donde han dominado los últimos, con severas consecuencias para la región en el ámbito internacional. Para que la democracia se logre desarrollar en Centroamérica es necesario que desaparezca la insurrección armada y la guerra civil y, la superación de la violencia, que ha alcanzado niveles muy elevados en la última década hasta convertirse en terrorismo, caso extremo de violencia. Se trata aquí de dar los posibles lineamientos que den explicación valedera a este fenómeno y a su vez, diseñar las políticas democráticas que puedan señalar el camino a seguir para superar este grave problema y dar así una verdadera democratización y estabilización a Centroamérica. Se ahonda en temas como el terrorismo estatal, violencia y terrorismo, subversión y terrorismo, el terrorismo transnacional y la importancia de Esquipulas II, donde se destaca ante todo, un mayor margen de acción de los actores regionales, una solución regional al problema. Para detener la violencia en América Central es necesario voluntad política de los centroamericanos y acuerdos a nivel internacional. OB/JM