Se enfatiza en la situación de los derechos humanos en Panamá antes de que se diera la invasión de Estados Unidos. Es importante recordar que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos había recomendado el cese de los actos de violencia, hostigamiento y tortura por parte de las fuerzas de seguridad y grupos armados en este país durante 1988 y 1989 las relaciones entre Estados Unidos y Panamá se caracterizaron por el incremento de las tensiones y por el deterioro de la sociedad panameña y, en especial, de los derechos humanos. Se ahonda en el derecho a la vida y las violaciones que se dieron de ese derecho antes de la invasión un ejemplo es la ejecución de los nueve oficiales que perpetraron un golpe de estado fallido, quienes se rindieron al General Noriega. Luego se analizan las muertes ocurridas como consecuencia de la intervención armada de Estados Unidos se calcula por parte de diferentes instituciones internacionales que las muertes ascendieron a más de 300 la Comisión de Derechos Humanos recibió información no confirmada de que las muertes se elevaron a 3 ó 4 mil personas. A su vez se mencionan muertes de personas después de la invasión, como la de José Cubulla, muerto por un miembro de seguridad de la Presidencia en circunstancias que no se han especificado. El informe de la Comisión de 1989, hizo referencia a las condiciones negativas en que el Poder Judicial venía funcionando, ante todo por el control que el Poder Ejecutivo ejercía sobre él. Posteriormente se enfatiza en la condición en que viven los encarcelados, sobre todo en los centros modelos de Colón y Renacer, donde existe hacinamiento de presos: en una cárcel con capacidad para 250 presos se encuentra una cantidad de 789. Seguidamente se enfatiza en otros derechos como el de la libertad personal, derecho de reunión, libertad de expresión. Se concluye que, a pesar de lo señalado, en Panamá se está comenzando a dar un mayor respeto por los derechos humanos. OB/ALJ