La constatación de que los problemas que afectan a las naciones del área desbordan las fronteras nacionales, ha hecho que se replanteen las antiguas fórmulas de cooperación regional; es por ello que la concertación, integración, cooperación y unidad, aunque nada novedosos retoman importancia política y económica, buscándose así para el siglo XXI, una verdadera independencia política y económica y mayores márgenes de soberanía. Estas ideas se ven plasmadas en iniciativas como el Grupo de Contadora con el fin de analizar y propiciar los esfuerzos pacificadores, posteriormente el Grupo de Apoyo; lo que vino a fortalecer los mecanismos del derecho internacional en la Reunión de Cartagena de Indias. Estos dos grupos se fusionaron y formaron el Grupo de los Ocho, donde como punto fundamental se tiene el apoyo a los procesos de pacificación y democratización de la región; reunión con la CEE, pero a su vez se abre en América Latina un nuevo intento de cooperación regional. El autor cree que el Grupo de los Ocho es un mecanismo de concertación política y diplomática del que careció América Latina, permite salidas latinoamericanas a los conflictos de la región, da mayores grados de independencia a la política exterior latinoamericana, permitirá la creación de un Parlamento Latinoamericano, promoción de iniciativas conjuntas para hacer frente al endeudamiento externo. AR/MR