Colección Centroamérica

El coronel Ochoa Pérez aseguró en un programa de televisión, que el coronel Guillermo Benavides "no actuó solo" en el asesinato de los sacerdotes jesuitas sino "atendiendo órdenes superiores". Estas declaraciones son importantes porque por primera vez después de meses de investigación, un coronel del ejército acepta que otros militares de alto rango además de Benavides, están involucrados en el asesinato de los sacerdotes jesuitas. También declaró que con motivo de la ofensiva rebelde en noviembre de 1990, se reunieron los dirigentes del Estad Mayor de las fuerzas armadas, para eliminar la izquierda del país. Este mismo programa que pertenece a la cadena CBS de Estados Unidos, señala y llama la atención sobre acusaciones que había vertido sobre los sacerdotes jesuitas meses atrás el Viceministro de Defensa, coronel Orlando Zepeda, quien los acusó de colaborar con la definición de planes estratégicos de la guerrilla. Por otra parte, el mismo programa cuestiona el verdadero interés del gobierno de Estados Unidos en esclarecer este asesinato. El general Rafael Humberto Larios manifestó que el ejército "está en disponibilidad de que el asesinato de los jesuitas sea totalmente aclarado", enfatizó que en todo caso, el asunto quedó ahora en manos de civiles y del poder judicial. Eduardo Colindre, representante del partido democratacristiano manifestó que su partido se siente insatisfecho por el rumbo que han tomado las investigaciones oficiales en torno al asesinato y que "la fuerza armada debe de ecxplicar y aclarar la posible participación de otros militares en el caso". OB/MR