Pretende incursionar en la relación "políticas de globalización" y "derechos sociales", en un esfuerzo por delinear formas institucionales que a manera de vínculo entre Estado y sociedad sirvan de soporte y garantía hacia la satisfacción de necesidades sociales como responsabilidad pública. Intenta identificar lineamientos que permitan viabilizar procesos de construcción de lo social, donde pueda cristalizar la existencia profundamente ética y humana de la justicia y la equidad social en instituciones que estén al servicio de tal propósito y de contribuir a generar solidaridad colectiva en torno a metas culturales que expresen valores sociales universales. Trata de dilucidar lo social como forma constitutiva del cambio, en un intento de incribirlo como idea de sociedad, rescatando lo que el concepto tiene de visión totalizadora, resaltando los aspectos valóricos que le dan viabilidad institucional a una sociedad justa frente a las cuestiones meramente de índole instrumental. Propone líneas de fuerza o ejes articuladores de un proyecto basado en la defensa de los derechos sociales, cuyas posibilidades de realización están dadas por tres actores con capacidad de comprender, actuar y construir: Estado, mercado y sociedad. Propone una matriz de responsabilidades o competencias como hipótesis de trabajo entre las líneas de fuerza y los actores. REV/LCL