Se analizan los periodos de 1981 a 1982 y del 2003 al 2004, años en los que el desempeño económico en los países de América Latina fue particularmente pobre. Asimismo, el PIB de la región con respecto al PIB actual ha ido disminuyendo. A esto se suma que la principal potencia económica mundial propone la derogación del pacto social vigente desde la Segunda Guerra Mundial y los años de la gran depresión. Esto se traduciría en la privatización de la seguridad social entre otras medidas de economía liberal que vendrían a intensificar las que ya de por si se han venido aplicando. Mientras tanto, el autor propone discutir sobre el desarrollo, cuando la principal tesis del texto es que el desarrollo no es el resultado de la acción de los mercados. Para esto se apoya en el marco de los derechos políticos sociales y económicos que conceden garantías a todos los seres humanos y que se deben cumplir en lugar de proteger al capital como si éste fuera más importante. Para el autor, se necesita el desarrollo para alcanzar la democracia