Se valoran los diferentes procesos electorales latinoamericanos y se trata de establecer tipologías. Se constata que para América Latina es necesario el replanteamiento de muchos de los instrumentos utilizados para el estudio de la política desde una aproximación comparada. El papel de los partidos políticos se ha visto modificado, de manera que aparece como algo nuevo dentro de sus características al momento de integrar y representar intereses, difícilmente tienen una clientela electoral concreta definida por variables como clase social, la región, el género, la etnia, la religión y la ecología, en forma complementaria la definición ideológica es muy vaga de allí la inconsistencia al momento de mantener programas. A su vez, tienen una gran capacidad para establecer alianzas que son el resultado de su pragmatismo, conjuntamente a la reformulación del papel de los partidos políoticos se da una disminución en el poder sindical, esto obedece al desgaste sufrido durante el período de represión militar, por efectos de la crisis económica que han mandado al sector informal a muchos trabajadores. En cuanto al período de democratización de la década de 1980, se plantea la puesta en marcha de transiciones destinadas a replantear la "matriz estado céntrica" vigente desde 1930. Se busca disminuir el tamaño del Estado tanto en la reforma estructural como en la privatización de amplios rubros del sector público. Por último, sintetiza que las democracias de la región tienen un futuro incierto. OB/MR