Analiza las raíces de los problemas que vive Centroamérica y las perspectivas políticas futuras, ahondando en cada país de la región. Para los casos de Guatemala, El Salvador y Nicaragua, enfatiza en el acelerado desarrollo de la guerra revolucionaria, en los tres casos se dio una conjunción de factores internos y externos, de condiciones objetivas y subjetivas que hacían presagiar el esperado triunfo del pueblo. Este hecho se conjuga con la débil política exterior aplicada por la administración Carter, lo cual se interpretaba como el declive del imperio que ya no tenía fuerzas para sostener sus hegemonías tradicionales. La revolución centroamericana era epoyada por una importante corriente a nivel internacional: la social democracia, mientras que importnates países como México y Venezuela se alejaban de la política norteamericana hacia la región. Todo lo anterior, unido al apoyo mundial de la internacional socialista indicaban las posibilidades del triunfo revolucionario. Luego de analizar la guerra en estos tres países se ahonda en las elecciones, como factor importante para la concreción democrática en la región, ya que mediante estos procesos se expresa el consenso y facilita la participación en el poder político de la sociedad. Los procesos electorales han representado un paso más en la legitimación de la cual se han servido las clases dirigentes centroamericaans, o sea, han sido un instrumento de legitimación en El Salvador y Guatemala en donde han pasado a formar parte de una estrategia contrainsurgente. Se agrega que para finales de la década de 1970, las raíces estructurales de la problemática se mantenían, las resoluciones se dan desde la revolución como vía principal hacia la reforma, la cual valora la apertura de las sociedades por medio de procesos electorales. OB/ALJ