Analiza la situación social, económica y política panameña. Se considera que dicha nación se ve sometida al general Manuel Antonio Noriega, comandante de las Fuerzas de Defensa, quien impone su voluntad al margen de la Constitución y de las leyes. Panamá, nación ocupada por su propias fuerzas armadas, las cuales actúan en contra de su propia gente, con más crueldad que un ejército extranjero. A Noriega se le acusa de corrupción, asesinatos, fraude, atracos a los fondos del Estado, tráfico de drogas y lavado de dinero. Se ignora allí la Convención de las Naciones Unidas sobre la prevención de la tortura, entre otros abusos. Los prisioneros políticos son torturados física y psicológicamente, incluyendo casos de vejaciones sexuales en personas de ambos sexos. De forma frecuente se han lanzado gases lacrimógenos dentro de iglesias, escuelas y supermercados, sin importar las personas que se encuentren dentro de estos lugares. Se emplean grupos paramilitares para allanar y realizar arrestos sin la orden judicial competente. Por otra parte, no existe la libertad de expresión los medios de comunicación no alineados con la dictadura han sido clausurados y se ha desconocido la separación de los tres poderes del Estado. En el año 1988, se depone al presidente Erick Arturo Delvalle y se imponen a Manuel Solís Palma como presidente, violando con ello la Constitución éstos hechos provocaron un caos general: las instituciones bancarias estuvieron cerradas seis semanas, a lo que se le agrega las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos, lo que terminó de agravar la situación económica panameña. OB/LOB