La autora continua el análisis de la emigración costarricense a Estados Unidos. En particular, se concentra en las redes que se han establecido entre Pérez Zeledón y la Zona de los Santos en Costa Rica con Nueva Jersey; en particular, la autora se concentra en el condado de Bound Brookm localizado en el municipio de Somerset, Nueva Jersey. La concentración de los y las necesidades de mano de obra de "ciudades globales" como Nueva York. La autora sostiene que la comunidad costarricense en Nueva Jersey constituye una expresión del transnacionalismo contemporáneo, el cual, por una parte, aporta fuerza de trabajo a las industrias globales, pero, por otra, crea mercados para productos de los países de origen, al tiempo que el envío de remesas procura sostener formas tradicionales de vida en las regiones expulsoras y produce reacomodos en las dinámicas familiares y las relaciones de género La autora termina señalando que esta emigración plantea una serie de retos para el Estado costarricense, pues hasta la fecha no hay reconocimiento oficial de los factores que la propician y de los retos que plantea la formulación de políticas públicas.