En este artículo se habla sobre los cambios en el gabinete que ejecutó el presidente de El Salvador Francisco Flores durante la tercera semana de mayo del 2001 y que tal actuación genera muchas dudas en relación a la evaluación que les precedió y además porque no se han incluido los ramos más altamente comprometidos: economía, medio ambiente y agricultura. En este documento se contextualiza el cambio en la cartera de Hacienda, considerando brevemente la trayectoria y situación de las finanzas públicas y se hacen algunas consideraciones sobre el desempeño de otras áreas económicas que sugieren que los cambios de gabinete debieron ser todavía más numerosos y de fondo. /MSD