Este libro rescata parte de la historia de la industria extractiva de Honduras, desde el comienzo hasta la actualidad, busca ilustrar el conflicto social generado por causa de este tipo de actividades en Honduras, un país a punto de alcanzar el auge minero. Así, analiza los impactos sociales de la minería y las acciones del movimiento antiminero. Para ello recoge testimonios de personas que conviven en el ambiente de la minería, rescata la opinión de funcionarios de gobierno y representantes de Comités comunitarios y organizaciones ambientalistas, esto recorriendo comunidades y sectores vinculados a las industrias extractivas a lo largo y ancho del territorio hondureño. El título alude a las consecuencias que puede significar para las personas y organizaciones que defienden los territorios y luchan por un ambiente sano. Esta investigación comparte la tesis de que el conflicto permite lograr un cambio progresivo institucional y social, además que los movimientos sociales ocupan una posición importante en este proceso.