Se indica que es el momento de poner fin a la irracionalidad, existe una ceguera del mercado, viendo este como lo mejor y lo último, la supuesta racionalidad absoluta del mercado "la ceguera de la iracionalidad, la ceguera del mercado, lo que éste no toma en cuenta, no racionaliza las consecuencias sociales, colectivas e individuales y ecológicas de su supuesto funcionamiento tatalmente eficiente y competitivo". Se aboga por una relación entre lo social y lo sindical, modificando ambas, particularmente al reconocer la importancia cada vez mayor de trascender el ámbito sindical para organizar a los trabajadores en sus lugares, en los barrios en donde viven. Para ello se necesita un cuestionamiento profundo, en el sentido de revisión crítica de las aún vigentes concepciones sobre las vanguardias, las relaciones entre los partidos y los movimientos sociales o sectoriales reivindicativos. Para una verdadera articulación social es necesario una verdadera organización y reivindicación, para ello deben de crearse espacios donde las bases tengan la posibilidad de desarrollar al máximo sus capacidades como sujetos plenos de su actividad, de su ser protagonistas de su presente y su futuro. LOB/LOB