La hipótesis principal de este avance de investigación sobre la política exterior guatemalteca (PE), plantea que durante el período de los gobiernos revolucionarios, esta política fue congruente con los cambios experimentados por el sistema político y expresó con fidelidad el "interés nacional" de la nación, reivindicando y expandiendo sus límites de autonomía relativa; esto le costó a Guatemala el deterioro de sus relaciones con Estados Unidos. Se hace un repaso histórico de la política exterior norteamericana, sus postulados ideológicos y sus doctrinas, para llegar a Truman y Eisenhower (contenimiento y "hacer retroceder" al comunismo), con las que tuvo que enfrentarse la política exterior guatemalteca, cuando dentro del marco de la guerra fría, cualquier intento por aumentar la autonomía relativa se interpretaba como amenaza a la seguridad e intereses norteamericanos. El estudio abarca sin embargo hasta el período presidencial de Juan José Arévalo (1950). Los postulados de la PE fueron: defensa de la soberanía nacional, democracia representativa, defensa de los derechos territoriales, no intervención y autodeterminación de los pueblos, unidad centroamericana, rechazo al colonialismo y respeto al derecho internacional. Estos principios motivaron y justificaron acciones como: la ruptura diplomática con España y su gobierno fascista, ruptura diplomática con República Dominicana y su dictador Trujillo; rechazo a los golpes de Estado, reclamo territorial de Belice, rechazo a ideologías extremistas de izquierda y derecha; declaración de "non grato" al embajador norteamericano Richard Patterson por inmiscuirse en asuntos internos y por participar en actividades para conspirar contra el gobierno del Presidente Arévalo. VJ/JM