Colección Centroamérica

Desde hace unos años las personas han adquirido mayor conciencia sobre los daños que causan, tanto sobre la salud de los trabajadores como sobre los consumidores y el medio ambiente, la utilización excesiva de agroquímicos. Esta concientización se ha adquirido gracias a la labor de muchas personas y de diferentes instituciones, las cuales han luchado con el fin de lograr un desarrollo sustentable para el bien de las generaciones presentes y futuras. De allí que junto a la agricultura modernizante, sobrevivan otros tipos de agricultura que compatibilizan más con el medio ambiente, como el café arbolado y el frijol tapado. La meta es lograr incrementar estas técnicas que tienen presente el factor ecológico entre las que destaca la agricultura orgánica, la cual ha avanzado con paso firme al punto de que hoy se puede encontrar en algunos supermercados capitalinos oferta de hortalizas orgánicas. Hablar de agricultura orgánica es hablar de una mentalidad positiva, pensando en las futuras generaciones. A partir de los años de 1988-89 los organismos no gubernamentales se convirtieron en actores muy importantes en el impulso y apoyo a experiencias campesinas en esta línea. Tal ha sido el crecimiento de esta agricultura que se han formado asociaciones de organismos no gubernamentales para facilitar la comercialización de los productos. Paralelamente, se sintió la necesidad de estructurar el proceso de certificación de la producción orgánica, sobre todo porque la producción ya se encontraba en los mercados y no tenía ningún tipo de control. Además se impartió el primer curso de agricultura orgánica, gracias al cual se comprobó que en el país existen experiencias muy avanzadas en agricultura orgánica, pero la mayoría necesitan mucho apoyo y a su vez, cada vez es mayor el número de campesinos interesados en ella. OB/ALJ