Colección Centroamérica

Se analiza el intento de golpe de estado que se trató de propinar al presidente Cerezo en 1988, el hecho fué controlado y el General Gramajo Morales, Ministro de Defensa, calificó los hechos como "algunas muestras de indisciplina". Un día antes de la intentona se había acusado a los democristianos de encaminar al país hacia el comunismo. El grupo parece representar a un grupo de militares descontentos que abarca a oficiales de las áreas de operaciones, y cuadros de diferentes zonas militares y al Estado Mayor. Probablemente no se buscaba el derrocamiento de Cerezo sino más bien el de tratar de negociar políticas y posiciones en torno al tema insurgencia y contrainsurgencia, se pedía una posición más fuerte ante la URNG, descartando la negociación o el acercamiento a ella. En mayo de 1989, se dió un nuevo intento de golpe de estado, al cual el propio Cerezo lo calificó como un intento de subvertir el orden institucional. En un documento de los golpistas se denunciaban las corrupciones a nivel gubernamental, se hacían plateamientos y demandas reaccionarias, pretendía destituir al General Gramajo, con el fin de aislar a Cerezo para que fuera más manejable. Se absorvieron a la mayoría de los alzados, como consecuencia de los golpes se ha dado una mayor desestabilización en el poder, se ha perdido la coherencia militar, la guerra a su vez hace emerger contradicciones internas en el ejército. También como consecuencia de los golpes se ha dado una posición más fuerte de parte del gobierno hacia la guerrilla y disminuye la posibilidad de una salida pacífica al conflicto armado. OB/JM