Se revisan las principales tendencias en el proceso social, económico y político latinoamericano diferenciando de manera esquemática el período de la modernización que va de 1950 a 1980 y el período de crisis profunda de 1980 a 1990. Durante el primer período, América Latina experimentó un fuerte crecimiento económico, el producto interno bruto creció a una tasa promedio de 5,6 por ciento anual, superior al índice de la economía mundial (4,7 por ciento). Durante este período el sector industrial tuvo un gran crecimiento, al tiempo que el sector agropecuario experimentó un proceso de modernización, basado por supuesto en el cambio tecnológico, mediante el cual se incrementaron las exportaciones. Se presentan cuadros estadísticos en donde se demuestra el crecimiento del PIB por país durante todo el período (1950-80), la expansión económica y el proceso de industrialización. Luego se ahonda en la crisis de los años ochenta, se exponen los mismos indicadores, para compararlos con el proceso anterior y determinar la profundidad de la crisis, además se agregan cuadros sobre la evolución de los precios al consumidor los números son tomados de informes elaborados por la CEPAL. Dentro de las consecuencias de la crisis se citan el incremento del desempleo urbano y el descenso del PIB por país. Por otra parte se indica que la dinámica social experimentó cambios trascendentales: la población pasó de 159 a 351 millones, con ello se dieron cambios significativos en la población activa y en su composición interna sectorial se presentan cifras sobre la población activa tomando en consideración la edad, el sexo y el país. Se analiza la población activa por sectores productivos, así como la natalidad, la fecundidad, la mortalidad y la esperanza de vida al nacer de 1950 a 1990. Quizás donde la crisis se ha manifestado más abiertamente ha sido en el incremento de la pobreza. Finalmente se expone la situación política de la región, destacando las políticas liberales y sus consecuencias. OB/ALJ