Cuando se examinan cuestiones como la educación en la mujer y su nivel de alfabetización en América Latina, se llega a conclusiones aparentemente contradictorias. Esto porque ha habido logros reales en términos de cobertura y de rendimiento, lo que permite sostener que el impulso hacia la igualdad de oportunidades, tal como se ha venido promoviendo en los años recientes y el acceso está dado allí donde la igualdad aún no se ha obtenido y que es de esperar que la situación mejore. Pero por otra parte, del análisis de los datos surgen comprobaciones más decepcionantes que justifican una continuada preocupación por el futuro del tema de los verdaderos logros y obstáculos en la educación formal de las mujeres. Además, están los problemas de carácter estructural que persisten en la mayoría de los sistemas de educación formal del continente y que limitan la expansión de la cobertura educativa tanto para hombres como para mujeres, lo cual se viene señalando desde los años 70s en los diversos estudios y diagnósticos donde el proceso educativo de las mujeres se liga estrechamente con la discriminación de género adoptada como una norma entre los valores culturales latinoamericanos, tanto para los contenidos educacionales como para las oportunidades profesionales. Precisamente el trabajo ahonda en la necesidad de poner en contrapeso los datos más recientes sobre el acceso de las mujeres a la educación formal en términos cuantitativos y los obstáculos con que éstas tropiezan en los sistemas educativos, para alcanzar una verdadera igualdad de oportunidades. OB/ALJ