Se sostiene, que cualquier investigación sobre el tema de la adolescencia, debe de desarrollarse bajo una perspectiva histórica, en el sentido de que para comprender el pasado, debemos comprender cómo ha sido su desarrollo hacia atrás, pero se debe de forma simultánea comprender también su orientación hacia el futuro, o sea, hacia dónde se dirige el desarrollo, sus necesidades y sus potencialidades. Se agrega que no se puede comprender en toda su magnitud al adolescente sino se ubica en su relación dinámica y dialéctica con su entorno, es decir, cómo ese desarrollo esas necesidades y esas potencialidades del entorno en el cual se desenvuelve, y qué tipo de procesos se dan cuando no se produce ese encaje y por el contrario se da una contradicción entre el individuo y su medio. De forma idealizada las investigaciones sobre desarrollo deben de ser longitudinales, pero los recursos, siempre son un obstáculo y obligan a proceder de manera sincrónica. Pero es precisamente esta oligatoriedad metodológica, la que obliga como ciencia subdesarrollada y como investigadores de países en desarrollo, que hace imprescindible el énfasis en las características procesales, dinámicas y dialécticas de la adolescencia como un proceso de desarrollo. LOB/LOB